Aquí tenéis el pesto de hoy, quiero decir el post de hoy, en fin después de este chiste tan malo esto solo puede mejorar, así que obviad lo que he dicho y seguid leyendo.
El pesto es una de mis salsas italianas favoritas y me encanta hacerla casera, pero aunque des más pena en la cocina que una canción de desamor de Laura Pausini, ¡Tranquilo! Tú también podrás hacerla porque es muy sencilla.
Si aun así no te ves capaz de prepararla, o eres más vago que el sastre de Tarzán, en el súper encontrarás varias opciones por menos de 2 euros.
Las salsas de pesto que he comprado en Carrefour son, pesto Knorr, pesto Gallo y pesto alla Genovese Barilla. De primeras diré que las tres son bastante aceptables, y ahora ¡Mamma Mía! Que me vengan todos los italianos haters a linchar como los valencianos a Jamie Oliver. En fin, ¿queréis saber cuál es la que más merece la pena de las tres?.
El sabor de las tres salsas es bueno, y sin ninguna duda la que tiene el sabor más intenso es la de Barilla. Pero sorprendentemente la de Knorr es la que más albahaca lleva, aunque mi paladar no piensa lo mismo, porque no tiene el frescor característico de esta hierba aromática. Hay que decir que en comparación con una salsa casera, ninguna es tan potente, pero no os quejéis cacho vagos que os ahorráis el andar dale que te pego al mortero, ¡algo habrá que sacrificar! ¿no?.
En cuanto al toque de queso, la de Gallo y la de Barilla son las que más regustillo tienen a queso, aprobados para todos los que seáis cheese lovers. Todas las salsas llevan en sus ingredientes queso Pecorino y queso Grana Padano. No vamos a ser ilusos y pensar que iban a poner Parmigiano Reggiano D.O.P. en estas salsas que se venden por debajo de los 2 euros.
En cuanto al aceite de oliva, ingrediente indispensable en el pesto, debo llamar a mi amigo Sherlock Holmes e indicarle que limpie bien su lupa porque va a ser muy difícil encontrar rastro de aceite de oliva en estos pestos. Todos ellos llevan menos de 2% de aceite de oliva, el resto del aceite que vuestras papilas puedan detectar es de girasol. El día que estaban probando las recetas en Gallo se debieron de despistar con el tema aceite, porque se les fue un poco la mano, ya que de las tres es la más aceitosa. Sin duda, este es mayor punto débil de las tres marcas.
Otros elementos que brillan *casi* por su ausencia son mis amigos los piñones, que han sido sustituidos por sus primos los anacardos, que son más feos (por aquello de cardos) pero sobre todo más baratos, aunque finalmente cumplen la misma función, que es aportar textura a la salsa. Este tema a diferencia del aceite de oliva, me parece bastante menos castigable.
Ahora viene mi parte favorita la consistencia de la salsa, cuando hago la salsa casera no siempre utilizo las mismas proporciones, y voy adecuándolas según como de espesa la quiera para la receta que esté preparando. Hay que recordar que el pesto es una salsa más bien espesa en la que se deben notar trocitos. Dicho esto, creo que hay países en los que las casas están hechas con un cemento de menor solidez que la salsa de pesto de Knorr. Fin, poco más que añadir sobre la consistencia de la salsa Knorr, en vez de una salsa es más bien un pasta, por no decir argamasa. Las salsas Gallo y Barilla tienen una consistencia más agradable ya que no son ni muy mazacote ni muy ligeras.
Los precios de las tres son bastante similares y todas están por debajo de los 2 €, aunque la que más tradicional parece que es la de Knorr, a mí la que más me ha gustado es la de Barilla, la de Gallo obtendría por tanto el segundo puesto. Aunque las salsas preparadas que se encuentran en el supermercado muchas veces suelen ser un truño, en este caso las tres marcas son muy dignas, y mi preferida ha sido la salsa de pesto alla Genovese de Barilla.
Si estás pensando en montar una cena de picoteo con amigos te recomiendo que utilices la salsa de pesto Knorr sobre una fina tostada con burrata y un tomate deshidratado por encima, una tapa express molona y sabrosa. Si quieres hacer una vinagreta con un toque a pesto para aderezar una ensalada caprese la salsa que mejor funcionará será la de Gallo, y por último si no te quieres liar la manta y quieres parecer la Nonna Antonella para una pasta con tomates confitados y bacon te recomiendo la de Barilla.